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Con la llegada del invierno y las bajas temperaturas, cuidar de nuestro jardín o plantas de interior se convierte en una prioridad.
El frío extremo, las heladas y el aire seco de la calefacción pueden ser fatales para tus compañeras verdes.
Para que tu hogar se mantenga lleno de vida y color hasta la primavera, te compartimos una guía práctica y fácil de entender con los cuidados esenciales.
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La clave está en entender que, durante el frío, las plantas entran en una etapa de "descanso" natural, por lo que sus necesidades de riego y nutrientes cambian drásticamente.
¿Cómo saber qué plantas necesitan más protección?
El primer paso es identificar a tus plantas más delicadas.
- Especies Sensibles: Las plantas tropicales (como helechos, orquídeas o calatheas) son las más vulnerables a las bajas temperaturas. Su lugar ideal en invierno es dentro de casa, cerca de una ventana donde reciban luz natural.
- Especies Resistentes: Las suculentas, cactus y ciertas plantas de hoja perenne soportan mejor el frío, pero incluso ellas necesitan ser resguardadas del viento y la lluvia directa.
- Estrategia de Agrupación: Si tienes plantas de exterior en macetas, agrupa los tiestos cerca de una pared o bajo un techo. Esto crea un microclima que les proporciona calor mutuo y las aísla de las peores condiciones climáticas.
¿Debo regar menos en invierno?
Este es uno de los errores más comunes y peligrosos: el exceso de riego.
Durante el frío, las plantas crecen muy lentamente, por lo que absorben mucha menos agua. Demasiada humedad puede provocar pudrición de raíces y la aparición de hongos, matando la planta desde la base.
- La Prueba del Tacto: Antes de regar, toca la tierra. Solo riega si la tierra está completamente seca al tacto, incluso varios centímetros bajo la superficie.
- Riego Matutino: Riégalas por la mañana y usa agua a temperatura ambiente. Regar de noche o con agua muy fría puede causar un choque térmico dañino.
- Suspende el Abono: Olvídate del fertilizante por ahora. Las plantas están en reposo y no necesitan nutrientes adicionales; abonar en exceso solo dañaría sus raíces. Espera a que el clima se caliente en primavera.
¿Cómo proteger mi jardín de las heladas y el aire de la calefacción?
Tanto las plantas de exterior como las de interior enfrentan riesgos únicos:
- Protección Nocturna (Exterior): En las noches más frías o cuando se pronostican heladas, utiliza mantas térmicas o fundas antiheladas. Estos materiales permiten el paso de la luz, pero funcionan como un escudo protector contra el hielo.
- Cuidado con la Calefacción (Interior): Si usas calentadores o radiadores en casa, evita colocar las plantas justo al lado. El aire seco que emiten puede deshidratarlas.
- Aumenta la Humedad: Para compensar el aire seco del interior, coloca las macetas sobre bandejas con grava y agua (sin que la base de la maceta toque el agua) o usa un humidificador.
- Maximiza la Luz: Las plantas necesitan aprovechar cada rayo de sol invernal. Coloca tus macetas cerca de las ventanas o, si tu casa es muy oscura, considera utilizar lámparas de cultivo LED que simulan la luz solar para estimular su desarrollo.
Siguiendo estos sencillos consejos, tu jardín y tus plantas de interior podrán sortear el frío con éxito y lucir sanas y radiantes hasta que regrese el calor.
