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A través de redes sociales se ha generado un intenso debate sobre el exhibicionismo de animales en zoológicos y las consecuencias que trae consigo la vida en cautiverio para distintas especies.
Y es que, aunque en varios países la regulación en materia de protección animal se ha endurecido —retirando ejemplares de circos, corridas de toros y trabajos forzados, por mencionar algunos casos— aún queda mucho por hacer en cuanto al cuidado y respeto hacia los animales.
Un ejemplo es el acuario de la ciudad de Alushta, en la península de Crimea. Visitantes han difundido videos y fotografías que revelan el maltrato a una enorme tortuga, exhibida en una pecera que no cumple con los requerimientos mínimos de espacio.
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En las imágenes se observa cómo niños y adultos se acercan al cristal para verla, pero el reptil no responde ni se mueve, limitado por un espacio extremadamente reducido.
Denuncia y campaña
La activista Shara Browning ha denunciado que la tortuga lleva cerca de 20 años en ese estado deplorable, sin que nadie haya intervenido.
Por ello, inició una campaña en Change.org para exigir su liberación, ya que el diminuto tanque le impide desarrollarse con normalidad y la mantiene en condiciones de encierro cruel.
La petición, lanzada el 22 de agosto, ya suma más de 17 mil firmas y señala como responsables directos al Ministerio de Ecología y Recursos Naturales de Ucrania y a la administración del acuario. Los firmantes piden que la tortuga sea trasladada a un santuario o centro de rehabilitación donde pueda recuperar una vida digna.
Usuarios de distintos países han calificado la situación como “inhumana” y “desgarradora”, reclamando una solución urgente.
El objetivo de la campaña es visibilizar el caso y presionar a las autoridades para que actúen cuanto antes.
¿Cuánto viven las tortugas?
Cabe recordar que las tortugas pueden vivir entre 50 y 80 años, y en algunos casos alcanzar hasta los 100.
La más longeva registrada fue Harriet, una tortuga de Galápagos que llegó a los 175 años.
Sin embargo, el entorno en el que habitan es clave para su conservación. Lamentablemente, muchas especies también enfrentan amenazas como el robo de huevos y el tráfico ilegal, impulsados por creencias falsas sobre supuestas propiedades afrodisíacas o por su valor cultural.