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REINO UNIDO.- En 1827, ocurrió en el condado de Suffolk, en Inglaterra, un dramático homicidio. Una joven, María Marten, fue asesinada por su amante, William Corder, en un granero en el que habían acordado citarse. Si bien el criminal trató de engañar a la familia de ella asegurándoles que gozaba de buena salud, finalmente descubrieron su cuerpo y Corder fue llevado a juicio. En líneas generales, se trató de un crimen digno de película.
Sin embargo, la historia mencionada queda en segundo lugar teniendo en cuenta lo que ocurrió después: Corder fue ejecutado públicamente al año siguiente, fue diseccionado y parte de su piel se utilizó para encuadernar un libro sobre su brutal crimen. Un tomo que estaba enterrado en una de las oficinas de un museo y ahora, se exhibe al público.

Se trata del museo de Suffolk que ha expuesto para el público una segunda copia de un libro encuadernado con la piel del asesino, junto con un original que ya se encontraba en una de sus vitrinas.
El libro es un volumen encuadernado por piel humana, y que a mediados de los años 30 pasó a formar parte de la propiedad del Museo Moyse's Hall de Suffolk. En días recientes, se halló esta nueva copia también con la piel de Corder (según estudios, cubierta de retazos de sus piernas) por lo que ahora han decidido colocarla junto al libro original.

"¡Descubra un caso de asesinato de la vida real en el Museo Moyse's Hall!", invitan en la web del museo, buscándole el atractivo a una tragedia, teniendo en cuenta que lo que se expone es nada menos que piel humana.