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PREGUNTA:
Tengo una amiga a la que le gusta la idea de tener intimidad conmigo y con mi marido. Entre broma y broma, siempre me lo dice. A mi los pelos se me ponen de punta al escuchar esto.. me parece una deliciosa locura pero puede que mal llevada termine muy, pero muy mal. ¿Verdad?
RESPUESTA:
Efectivamente, mal llevado puede terminar muy mal. Pero si ustedes como pareja, se vuelven aliados antes todos los demás, se unen, esa es una fase nueva de matrimonio. Un matrimonio fuertes es el que pasa pruebas; los que son celosos, inseguros y a los que gustan de vivir atrapados, mejor no deben jugar. Es bien sabido que los juegos aceleran la ruptura de algunas parejas.
PREGUNTA:
Mi papá anda con una mujer tres años más chica que yo, que tengo 26. No soporto esta situación. No lo soporto. No quiero verlos, ni convivir con ellos, ni ir a su casa. No quiero salir en sus fotos, no quiero que anden ni que me llamen cuando corten. Cuando mi papá deje de hacer el ridículo andando con una más jovencita, tampoco querré verlo. No quiero verlo, no quiero saber de ellos. No quiero. ¿Estoy mal?
RESPUESTA:
Imagina por un momento que tu padre se pusiera en la misma situación con una pareja tuya. A veces los padres son más fresas que los hijos; a veces no. El que pide respeto, respeta. A la pareja que tus padres elijan les debes el mismo respeto que pides para tus parejas. El juicio no te lleva por un camino de paz.
PREGUNTA:
Me encontré a un amigo de antaño en un café. Él es la casado, y yo, la embarazada. “Siete meses de embarazo, me faltan dos para dar a luz” le dije y lloré. Él me calmó. Ya era de noche. Su coche no arrancó. Lo lleve a su casa. Volví a llorar del miedo de ser mamá soltera. Él, me consoló. Dijo todo lo que necesitaba oír. Además me dijo que su mujer no puede embarazar; que con su mujer no está bien. Tengo ganas de que me cobije, que me abrace, que me cuide. ¿Me lanzo con él al precipicio?
RESPUESTA:
Vas a tener un hijo, no te lances al precipicio con nadie. Estás en un momento crítico, necesitas rodearte de amor y confianza. Plantea tus propósitos como madre, esta parte es ahora la importante. Meterte entre en un matrimonio antes de dar a luz es complejo, que él haga lo suyo. Ahora necesitas paz. Tenerte toda. Ve en tu maternidad un abrazo a ti misma. Primero, tú contigo. Con tu maternidad.
PREGUNTA:
Mi hermana va a casarse con un hombre que tiene problemas con el alcohol. Es más joven que ella, le gusta la fiesta y no parece tener intención de cambiar. Me preocupa que ella no vea los riesgos y termine sufriendo. Lo que sucede es qu ese quiere casar, quiere hijos y está dispuesta a tenerlos hasta sola. ¿Cómo puedo hacerle entender mi preocupación sin alejarla?
RESPUESTA:
Es completamente válido que te sientas frustrada y preocupada por las decisiones de tu hermana mamá, especialmente cuando ves que repite patrones dañinos. Sin embargo, también es importante reconocer que su vida y sus elecciones le pertenecen a ella, por más que te duela. Tu cariño y presencia en su vida le van a dar fuerza. No te frustres ni te dejes abatir.
PREGUNTA:
Detesto mi trabajo. Mi vida se consume en una rutina vacía, sin pasión ni propósito. Solo sigo adelante por la responsabilidad de mantener a mi familia, pero dentro de mí solo hay agotamiento y frustración. ¿Cómo puedo encontrar una salida sin sentir que los estoy abandonando o fallando?
RESPUESTA:
Es momento de hacer un alto en el camino. Hablar con las personas que dependen de ti y antes de hacer cambios tener un plan de acción. Quedarte en la nada es peligroso. Buscar alternativas te va a dar un toque de realidad. Es importante tener un ahorradito, no sueltes todo a la primera. Observa tus necesidades y busca tu pasión.
