En la elección de jueces y magistrados se necesita mucha sobriedad, asumir seriamente las implicaciones de elegir a quienes imparten justicia, deciden sobre los derechos, las libertades y lo legal e ilegal. Y para eso, hace falta cabeza fría.
No es un concurso para reconocer al más popular ni un acto caprichoso de castigo o premiación. El voto para quienes juzgan exige otra actitud: una mezcla de conocimiento, madurez y mesura.
Hasta ahora, el Poder Judicial había sido algo lejano. La mayoría, incluso, desconocía cómo se nombraba a un juez o un magistrado.
En ese contexto, la jornada electoral es un ejercicio de responsabilidad que implica conocimiento de las y los candidatos, mirar los perfiles con lupa: si quien pide el voto ha defendido a víctimas, si tiene un historial limpio.
La justicia está presente en situaciones como el retraso en la pensión alimenticia, un juicio postergado o la empresa contaminante sin sancionar. Por eso, si vamos a confiar en la capacidad de un juez o magistrado, lo mínimo es poder elegirle.
Este domingo, en la CDMX se votará por 137 personas juzgadoras para integrar el Poder Judicial local: 98 jueces y juezas, 34 magistradas y magistrados, y 5 integrantes del Tribunal de Disciplina Judicial. Además de los 881 cargos a nivel federal. En total, en las casillas entregarán nueve boletas.
¡Ponte al tiro! Para garantizar la otra sobriedad al votar, la Jefa de Gobierno Clara Brugada anunció ley seca este domingo. Y si detectas alguna irregularidad, en el 9-1-1 del C5 recibimos tu reporte.
@guerrerochipres