RENOVARSE O...
Resulta que por los rumbos de Donceles y Allende, quien ha comenzado a perder el poder que tenía es la diputada morenista Martha Ávila, y quien le ha puesto un hasta aquí es su compañera de bancada, la morenista Xóchitl Bravo.
Y es que Ávila tuvo que remover a su incondicional Susana Coeto de la Dirección de Comunicación Social del Congreso de la Ciudad, a quien preservó en el cargo varios años, de acuerdo con su conveniencia y no a la de todos los diputados.
Al quite llegará, para sorpresa de muchos, la exdiputada local de Morena, Donaji Olivera Reyes; ayer, en sesión ordinaria, la también comunicóloga por la UNAM, rindió protesta ante el pleno y su nombramiento fue aprobado con 55 votos a favor y cero en contra.
Dicen los enterados que se esperan buenos tiempos en materia de comunicación social en el Congreso Local, porque vaya que le hacía falta renovarse.
BAUTISMO GUINDA
Si alguien acostumbraba hablar pestes de los morenistas, y en particular de los hijos del expresidente Andrés Manuel López Obrador, esa era la senadora Cynthia López Castro, quien decidió traicionar a sus electores y pasarse al grupo parlamentario de Morena en el Senado de la República, luego de ser electa por la Alianza PRI-PAN-PRD, por así convenir a sus intereses.
Cuando defendía los colores del PRI, Cinthia López decía que “ni ganas de conocer a los hijos de López Obrador”, que ellos solo tenían “amigos en Houston y que eran millonarios” e, incluso, que López Obrador y su familia eran corruptos. Ayer, la expriista aprovechó la visita de Andrés López Beltrán al Senado para afiliarse a Morena y tomarse una foto con él, en la que ambos salieron muy sonrientes.
