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Para Pedro y Jonathan, su último “jale” fue extorsionar a comerciantes de la colonia Gabriel Ramos Millán, en la alcaldía Iztacalco.
Ahí, un ciudadano cansado de ser víctima de este delito, los baleó frente a decenas de locatarios.
A las 8:00 de la noche del pasado domingo, ambos se encontraban exigiendo cuotas a los trabajadores en ese mercado ubicado entre las calles Sur 163 y Oriente 108.
¿Quién decidió hacer justicia por su propia mano en Iztacalco?
A Pedro no le importó también llevar a su hijo de apenas 15 años a ser partícipe de este delito.
Los tres circulaban a bordo de una moto entre los puestos, y cuando menos se lo esperaron, un sujeto se les aproximó y les disparó a quemarropa en repetidas ocasiones.
A Pedro, de 33 años, le dieron varios impactos de bala cerca del pecho y, de paso, alcanzaron a balear a su hijo, por lo que minutos después sus familiares los subieron a un coche particular y los trasladaron a una clínica particular, donde Pedro falleció debido a la gravedad de las heridas.
Por fortuna, a su hijo solo una esquirla le alcanzó a rozar la parte superior de la espalda, mientras que Jonathan, quien fue identificado como un exreo, también alcanzó a librarla.
De acuerdo con registros policiales, desde hace al menos ocho años Pedro tenía cuentas pendientes con la justicia, pues en 2007 fue vinculado a proceso tras cometer un asesinato.
Pese a ser un delito mayor, salió de la cárcel, pero siguió delinquiendo robando y extorsionando.
Víctimas señalaron que él exigía cuotas de hasta 15 mil pesos para dejarlos trabajar.
