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Desde que Erik salió de la cárcel, Elizabeth escondía las marcas de los golpes que el expresidario dejaba en su cuerpo. Ella fue hallada muerta en un puente cercano a la casa donde vivía con su pareja.
La ropa rasgada, la sangre en el tórax y el rostro golpeado alertaron a los vecinos de la colonia Caltongo que hallaron el cuerpo de la víctima abandonado en un puente peatonal de la alcaldía Xochimilco.
Ellos avisaron a los policías y paramédicos que llegaron a confirmar lo que los habitantes sospechaban: ella fue golpeada y asesinada con un cuchillo que le insertaron en el abdomen.
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Aunque las marcas en el rostro no dejaban que alguien la reconociera, las credenciales que llevaba en la cangurera permitieron dar con sus familiares.
Fueron los hermanos de la víctima quienes acudieron al puente ubicado en las calles Nuevo León y Callejón Arboledas para identificar el cadáver.
Ellos no dudaron en declarar que Erik era la pareja de Elizabeth y que desde hace poco más de un mes que él salió del reclusorio Oriente. El hombre de 44 años aprovechaba su libertad para embriagarse y golpear a la mujer con la que vivía.
La familia de Flor Elizabeth lo sabía porque ella llegaba con vendas en los brazos y moretones que la obligaron a confesarles que el expresidiario se había convertido en un hombre agresivo y que la violentaba.
Por eso, los hermanos de la víctima pidieron que se revisaran las cámaras de vigilancia de la zona donde ella vivía. Ahí captaron a un hombre con las características del expresidiario y que llevaba bolsas y una botella en las manos.
