En una montaña de fierros, residuos y bicicletas quedó atrapado Rey, durante un incendio causado por un corto circuito en Iztapalapa. El hombre, que trabajaba como pepenador, murió en el lugar.
En la casa donde él vivía había toneladas de fierros, triciclos y bicicletas acumuladas sobre la vivienda.
Eran tantos los residuos que había acumulado el hombre, que entrar a la casa se dificultaba.
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Ahí en esa casa con cartones y residuos comenzó el fuego que alertó a los vecinos.
Ayer por la madrugada, el olor a quemado obligó a los habitantes de la colonia José María Morelos y Pavón a salir a indagar qué ocurría.
Eran casi las 3:00 de la madrugada cuando se dieron cuenta de las llamas comenzaban a consumir la casa del pepenador ubicada en la calle Congreso de Apatzingán.
Aunque la lluvia ayudaba a que el fuego no se propagara hacia las casas aledañas, ésta no logró apagar el fuego que consumía el hogar de Rey.
Por eso, los vecinos pidieron ayuda de los bomberos, que en minutos llegaron al lugar del siniestro.
Ahí, los tragahumos trabajaron con mangueras y pipas con agua para sofocar las llamas.
Ellos no tardaron en apagar el incendio, pero a pesar de que la emergencia había pasado, no lograban hallar al habitante de la casa.
Entre el calor de los residuos calcinados, los bomberos escarbaron para buscar al hombre. Así fue durante la madrugada y hasta después del amanecer.
Fue hasta después de las 9:00 de la mañana, cuando los bomberos hallaron el cadáver del hombre.
Más tarde, familiares de las víctimas se encargaron de reconocer el cuerpo que fue trasladado al anfiteatro de la agencia ministerial.