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Después arrollar a una pareja de motociclistas, el chofer de un autobús aceleró para huir. Pero los los testigos del accidente, lo alcanzaron y retuvieron hasta que los policías llegaron al lugar donde una mujer murió y su acompañante fue herido.
La mañana del 20 de julio, el conductor de un transporte público corría a exceso de velocidad por los carriles centrales de la Calzada Zaragoza, en Iztapalapa.
Ni los radares de velocidad colocados en la zona de la colonia Ejército Constitucionalista detuvieron la carrera del chofer del camión.
Casi al cruzar por debajo del puente de Telecomunicaciones, el conductor se encontró con una pareja que viajaba por los carriles centrales en una motoneta de bajo cilindraje.
Sin lograr frenar para evitar arrollarlos, el conductor terminó por atropellarlos.
Fue un golpe, lo que hizo que los dos ocupantes y su motoneta salieran proyectados al pavimento.
Al ver lo ocurrido, el chofer aceleró para tratar de escapar pero los testigos del accidente lo alcanzaron metros adelante y le cerraron el paso para obligarlo a descender del camión.
Ahí lo mantuvieron sentado en el camellón hasta que paramédicos y policías arribaron al lugar.
Ellos informaron que la mujer que viajaba como copiloto murió mientras que su acompañante fue herido de gravedad.
El conductor fue detenido y llevado a la agencia ministerial.