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A las cuatro de la tarde con cuatro minutos un sicario con casco de motociclista ingresó al restaurante Pargot, ubicado sobre la calle Córdoba, en la colonia Roma. Sosteniendo un arma, se paró detrás de Carlos Leiva, quien se encontraba sentado, de espaldas, acompañado de dos personas, en una de las mesas cercanas a la puerta de salida.
El hombre apretó el gatillo y apuntó directamente hacia la cabeza de Carlos, pero la pistola se encasquilló. Lo volvió a intentar y falló.
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Carlos se atajó unos segundos bajo una mesa y, al percatarse que el agresor salió del restaurante, corrió hacia otro punto del restaurante. El sicario volvió y disparó contra Carlos, pero falló nuevamente. Sólo una bala perforó uno de los cristales del sitio.
Todo ocurrió en un minuto, según se observa en los videos registrados por las cámaras de seguridad del sitio.
Durante esos segundos, comensales y trabajadores del lugar, se tiraron al suelo.
Carlos Leiva, el hombre que se salvó de milagro, fue identificado como un abogado del Despacho Jurídico Leyva y Asociados. Se desempeñó como agente del Ministerio Público de la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo, y como asesor de proyectos de la Comisión de Factibilidad del Estado de México.
Los hechos fueron calificados por la alcaldesa de Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega, como graves. “El crimen organizado está avanzando en CDMX y no podemos normalizarlo”, señaló en un mensaje compartido en sus redes sociales.
