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El alcohol, la velocidad y el impacto contra un poste lanzaron al copiloto de un automóvil a la muerte. Por la magnitud del accidente, el motor del automóvil salió proyectado hacia un camellón de Iztapalapa.
El percance ocurrió casi en la misma zona del Periférico Oriente en donde horas antes dos motociclistas murieron arrollados por un vehículo de carga.
Ahí, en el Periférico Canal de Garay, a la altura de la colonia Puente Blanco, viajaban los dos hombres a bordo de un automóvil Mini Cooper.
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Casi a las 6:00 de la mañana, el conductor aceleraba de más sobre los carriles mojados por la lluvia. Al llegar al cruce con la calle Río Hondo, el hombre perdió el control del volante.
Tras pegar contra el poste de concreto, el vehículo giró en varias ocasiones para después volcar.
Durante las volteretas, partes del coche salieron proyectadas junto con el cuerpo del hombre, de unos 37 años, que iba de copiloto.
La víctima cayó a la orilla de la banqueta. El motor fue lanzado hacia el tronco de un árbol localizado en un camellón y otras partes del coche quedaron esparcidas en el pavimento.
Tras lo ocurrido, el automóvil comenzó a incendiarse. Fueron los testigos que circulaban por el lugar, quienes pidieron ayuda de los policías y de los servios de emergencias para que acudieran a ayudar a los dos hombres que viajaban en el automóvil.
Al llegar al sitio, los testigos ya habían lograr sofocar el fuego. Dentro de coche hallaron al conductor, de 27 años, herido y alcoholizado.
El sobreviviente fue trasladado a un hospital, donde más tarde declaró ante las autoridades sobre lo ocurrido.
Aunque los paramédicos intentaron auxiliar al copiloto, el murió por los golpes que recibió al salir lanzado del vehículo.
