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Erick, de 13 años, acudió a un campamento militar de la Academia Militarizada Ollin Cuauhtémoc, pero no regresó vivo. Familiares y testigos acusan que personal de la institución lo mató con golpes y torturas.
El pasado 23 de abril Erika, madre del menor, lo llevó a las seis de la mañana a la Academia ubicada en Santa María la Ribera, en la alcaldía Cuauhtémoc. De ahí, los niños y personal del colegio partieron para Cuautla, Morelos, donde se llevó a cabo el campamento.
Erika relata que el día 24 tuvo un mal presentimiento. Vía telefónica le preguntó al personal de la Academia que si su hijo estaba bien. Una teniente se limitó a decirle que sí y se comprometió a mandarle fotos del niño, pero en lugar de eso, le envió imágenes de unas cabañas.
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El pasado viernes los niños regresaron a la Ciudad de México. Erika esperaba a su hijo, pero la Academia le notificó que el menor estaba en un hospital debido a que presentó insolación.
Esa versión fue desmentida por los médicos, quienes le informaron a Erika que su hijo sufrió un paro cardiorrespiratorio tras ser víctima de agresiones físicas.
Tras practicarle una necropsia, los resultados arrojaron como causa de muerte un estallamiento de vísceras.
Los niños que estuvieron en el campamento le contaron a la madre y a las autoridades que tanto ellos, como Erick, fueron víctimas de abusos y tortura por parte de un Sargento identificado como Juan Carlos y una Capitana de nombre Mariana.
“El sargento les estaba pegando a todos los niños de patadas. La capitana Mariana arrastró a mi hijo durante 10 minutos por todo el lugar. Les dijo que se sentía mal por todo un día y no hicieron caso”, relató Erika.
“El capitán ya sabía que mi hijo había fallecido, desde el viernes a las dos de la tarde. El capitán ya sabía, en el campamento ya estaba sin signos vitales”, agregó.
La madre del pequeñito acudirá dentro de 15 días a recoger los resultados de una segunda necropsia.
“Tengo que ir otra vez por la necropsia porque la mandaron a patología ya que salió que se reventaron los intestinos, que no era algo normal. El capitán quiso decir que se había muerto porque tenía asma y porque le dio un golpe de sol”.
A Erick lo velaron la tarde de ayer en una funeraria de la alcaldía Cuauhtémoc. Al exterior, familiares y amigos exigieron a las autoridades el esclarecimiento del caso.
En un comunicado la Academia Militarizada Ollin Cuauhtémoc señaló que, por el momento, no darán detalles de las causas de la muerte debido a que hay iuna investigación en curso.
