Más Información
Una gata realizó un viaje no planeado entre Nueva Zelanda y Australia, completando tres vuelos en 24 horas debido a un error del personal de la aerolínea Air New Zealand.
Mittens, una gata de la raza Maine Coon, viajaba el 13 de enero con su familia desde Christchurch hacia Melbourne, donde se establecerían de manera permanente.
Se trata de un vuelo que no dura más de una hora. Sin embargo, al llegar a su destino, el personal del aeropuerto no retiró a la gata del compartimiento de carga, pues su jaula quedó oculta debajo de una silla de ruedas.
Lee también: Filtran documento de acusaciones contra Imelda Tuñón: Con “hombres ebrios y desnudos”
La dueña, Margo Neas, esperó durante tres horas la entrega de su mascota en Melbourne. El personal le informó que el avión había emprendido el vuelo de regreso a Nueva Zelanda con Mittens a bordo. El trayecto entre ambas ciudades tiene una duración de 7.5 horas.
La jaula de Mittens había quedado detrás de una silla de ruedas, lo que significa que los manejadores de equipaje habían pasado por alto su presencia.
La empresa Move My Pet, responsable de coordinar el traslado inicial de Mittens, intervino para gestionar su retorno a Melbourne una vez que la gata llegó de vuelta a Nueva Zelanda. La tarifa original del servicio fue de unos 23,000 pesos en su equivalente en dólares neozelandeses, aunque como era de esperarse, el vuelo de regreso no generó costos adicionales para Neas.
Al reunirse con su dueña en Melbourne, Mittens se lanzó a sus brazos para acurrucarse. La mascota presentó pérdida de peso tras el viaje. "Fue un alivio", expresó Neas a la agencia AP al reencontrarse con su gata después de la travesía no programada, que incluyó tres vuelos consecutivos en menos de 24 horas: Christchurch-Melbourne, Melbourne-Christchurch y Christchurch-Melbourne.
