Estados Unidos y Canadá entra en su cuenta regresiva, lo que ha permitido que los aficionados de todo el mundo conozcan a la mayoría de las naciones participantes.

Una de las que más sorpresa generó fue Haití, equipo que, contra todo pronóstico, mostró su calidad en la cancha y, con una base de jugadores talentosos y con experiencia, se quedó con el boleto tras una larga

Con el pase en las manos, que significa el regreso del país al torneo de la FIFA luego de su debut en 1974, es decir, 52 años después de que en esa edición quedaran eliminados en la fase de grupos, el cuerpo técnico —encabezado por Sébastien Migné— ha comenzado la planeación.

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En ese estudio se puso en el radar la posibilidad de sumar a la plantilla —que cuenta con figuras de la talla de Jean-Ricner Bellegarde y Josué Casimir— al delantero del América, Allan Saint-Maximin.

Sin embargo, fue el mismo jugador de las Águilas quien aclaró dichas suposiciones y dedicó unas palabras de motivación a la Selección de Haití.

“Quisiera felicitar al pueblo haitiano y a la selección nacional por esta histórica clasificación. Este es un momento importante y estoy sinceramente feliz por Haití”, expresó en la red social X.

Y continúo: “Veo que algunas personas han establecido contactos, probablemente porque soy de Guadalupe y la Guayana Francesa. Pero, para que quede claro, no hay planes ni proyectos relacionados con la selección nacional de Haití. Mi más sentido respeto a los jugadores haitianos que se ganaron su lugar en este Mundial. Lucharon duro por esta clasificación, y es importante no asociarlos con rumores. ¡Mucha suerte para ellos en el Mundial!”, concluyó.

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