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A partir de este sábado, Guillermo Ochoa junto con sus compañeros tienen 10 partidos que tendrán que jugar como si fueran finales para asegurar la permanencia del AVS en la máxima categoría del futbol de Portugal.
Con la victoria de la semana pasada ante el Farense (0-1), el equipo donde milita ‘Paco Memo’ salió de los últimos tres lugares de la tabla general, por lo que el destino, se encuentra en sus manos. La ‘mala noticia’ para el mexicano es que en el cierre de temporada le toca a enfrentar a los denominados ‘grandes’, que apropósito, se encuentran de punteros en la clasificación.
La primera prueba para Ochoa y el AVS es este sábado, cuando se midan al Arouca, un conjunto que está dos puntos arriba en la tabla de posiciones, y que también tiene como objetivo, salir de la zona del descenso.
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A partir de ahí le quedan el Porto de Martín Anselmi, Braga y Benfica, todos, equipos contendiendo por la punta en la liga. Además de partidos directos por la salvación, contra el colero, Boavista y uno de sus más grandes en esta circunstancia como el Estrela Amadora. También están los equipos que se encuentran peleando a en media tabla como el Casa Pia, Famalicao.
Sin duda alguna, Ochoa está ante uno de los retos más difíciles en su carrera en la que quizá pueda ser su última temporada en Europa.
AGARRÓ CONFIANZA
El cambio en el banquillo del AVS de Portugal fue benéfico para el rol de Guillermo Ochoa, ya que con Daniel Ramos había estado relegado. Desde la llegada de Rui Ferreira, el canterano de las Águilas del América ha sumado siete partidos como titular, el último de ellos ante el Farense, en donde logró sumar su segunda portería imbatida.
