Dos momentos distintos en la vida de Alejandro Sanz reflejan el espíritu de su música. Cuando se presentó en el estadio GNP de la ciudad de México su interpretación era melancólica, pero hoy, en la primera presentación de su tour 'Y ahora qué' lo hace con bríos renovados.
Este el pasado 12 de septiembre arrancó con la primera de seis fechas que ofrecerá en el Auditorio Nacional. Una noche de localidades agotadas donde el cantante y compositor español hizo parar de su asiento al público durante casi todo su show, refrendando por qué es una de las estrellas internacionales de la música hispanoparlante.

"Nuestra primera de esta retahíla de noches que nos esperan. Tengo todas las ganas del mundo de cantarle a este México que me tiene el alma apachurrada desde hace tantos años; espero que lo disfruten, esto va para ustedes, es su noche, hagan lo que quieran, lo que les dé la gana y, al final del show, nos vemos por ahí", externó el español.
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Y es que, en verdad, fueron muy pocas sus participaciones con el público durante poco más de dos horas de espectáculos, ya que prefirió cambiar las palabras hacia el respetable por la mayoría de canciones que pudieran ocupar 'en su caja de música', acomodando un compendio de 30 años de carrera.
Así arrancó la noche con la melodía 'A la primera persona', con una mirada cómplice a su actual pareja la actriz Candela Márquez, quien se encontraba en la primera fila de la presentación.
En este inicio de tour, la imagen del hombre mayor, del bohemio quedó atrás: el cabello cano fue cubierto por un tono más oscuro y los días de la barba crecida que ya muestra de forma natural su tono plata por el paso de los años, ahora tiene apenas unos visos de crecimiento, lo que le hacía ver un poco como aquél chaval que conquistó Latinoamérica.
No podía faltar la bienvenida cuando una fan le regaló una bandera de México, la cual entregó con todo el corazón a su novia, compartiendo así todas las emociones y alegrías con ella.
Alejandro salió al escenario con una camisa en color oscuro que durante el concierto cambiaría por una playera de tirantes con gorra, lo que le dejaba ver ahora todos sus tatuajes, las marcas que le dejaron todas sus experiencias.
Es verdad que ya no es el mismo joven delgado, los años hacen su trabajo y se refleja en el físico, sin embargo, la energía en el escenario, la presencia, su calidad como status de estrella se mantiene en aumento al rodearse de un equipo de jóvenes músicos y cantantes.
No sólo es la voz de Alejandro Sanz en el escenario, es el todo, personas de primer nivel que lo acompañan, ya que algunos no sólo son músicos, algunos también se suman al show como cantantes y coristas, es todo un conjunto donde la maquinaria parece ir a la perfección.
Durante el concierto, la balada pop solo es el pretexto para 'jugar' con la música, disfrutar de la magia en el escenario donde se fusionan los rifs de guitarra más roqueros dentro de las melodías, y es escuchar la intensidad de los metales de trompeta y trombón.
En el escenario se pasa de la melodía romántica que baja las pulsaciones del corazón, hasta hacer brincar a su público con el sonido más pop o mover las caderas con una rumbita flamenca.
"Me da tanta alegría saber que nos vamos a ver cinco veces más. Los quiero un chingo, ya lo saben de siempre, los quiero sin medida, sin control y eso no va a cambiar nunca", indicó en en otra de sus intervenciones.
Sanz reflejó en el escenario el momento personal por el que atraviesa, ya que excluyó una de las canciones de gran dolor que salió de su pluma en los recientes años, 'El Trato' y optó, en estas revitalizadas energías que al parecer le da el amor, cerrar su show con Corazón Partío hasta en versión dance, muy bailable, así de enérgico está el creador de 'Amiga mía'.
"Estoy convencido que la vida son momentos y si no lo entregas todo ¿para qué?" reflexionó ante sus seguidores.
Durante el show desfilaron temas clásicos de su repertorio como Y si fuera ella, entre otras, además de su reciente producción como 'El vino de tu boca', ''Hoy no me siento bien', además que hizo el estreno de su más reciente sencillo 'No me tires flores'.
"En dos horas hemos estado a gusto, esa es la magia de la música. Gracias por dejarme ser parte de eso. ¡Viva la música, viva la vida y viva México! expresó el compositor.