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El cantante estadounidense de ascendencia mexicana, Gerardo Ortiz, se declaró culpable de vínculos con el narcotráfico, aunque evitaría la cárcel al llegar a un acuerdo con el Buró Federal de Investigaciones (FBI).
Con esto es un hecho que el intérprete de 'Dámaso' y 'Aquiles Afirmo' optó, como circula en varios medios de comunicación, por entregar información relevante contra su mánager y propietario de la productora DEL Records, José Ángel del Villar, quien fue vinculado por su presunto involucramiento financiero con una organización criminal.
En marzo de 2025, Del Villar fue declarado culpable de 11 cargos, entre ellos la violación de la Ley Kingpin, que prohíbe a estadounidenses hacer negocios con integrantes de la delincuencia organizada, conspiración para realizar transacciones con un narco y hacer millonarios negocios ilícitos.
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Como reveló en su momento la revista Rolling Stone, el FBI detectó una serie de conciertos realizados por Ortiz en 2018, los cuales fueron presuntamente financiados por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y cuya aval para dar los shows habría sido la agencia de Del Records.
Cuando el empresario enfrentó a las autoridades estadounidenses, manifestó: "Yo quería venir al juicio, yo sí vine a confrontar esto. No me senté a negociar o a firmar para no confrontar las consecuencias".
Luego de conocerse el supuesto acuerdo entre Gerardo y las autoridades norteamericanas, en el programa radial 'ALM Noticias' con los comunicadores Héctor Raúl González y Pedro Tonantzin, develaron la realidad de los cantantes de narcocorridos.
"Yo (Gerardo) obtengo beneficios al ser ciudadano estadounidense... A ver por qué no hacen una rola donde diga, lo mismo hizo El Chapito, lo mismo hizo El Grande, La Barbie... ¡puro sapo!/soplón", indicó Tonantzin.
Mientras González manifestó: "Y a los chavos les terminan vendiendo la idea de lealtad y a la hora de la hora, chamacos que son carne de cañón, que se los lleven".
