El mariscal de campo Aaron Rodgers confirmó durante una charla con su amigo Pat McAfee que planea retirarse al finalizar la temporada 2025, su primera y -ahora sabemos- única con los Pittsburgh Steelers.
"Estoy seguro de que esto es todo", declaró Rodgers de 41 años durante la transmisión de este martes del programa del expateador de los Colts en ESPN. "Por eso firmamos un contrato de un año. Los Steelers no necesitaban agregar años adicionales. Esto se trata de terminar con amor, diversión y paz la carrera que he tenido".
El veterano, quien ha sido parte de la NFL durante 20 temporadas, firmó oficialmente un contrato de un año con Pittsburgh a principios de este mes por casi 20 millones de dólares.
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Rodgers pasó la mayor parte de su carrera con los Green Bay Packers antes de unirse brevemente a los New York Jets. Su decisión de finalizar su trayectoria con los Steelers le permitirá enfrentar a ocho equipos en partidos como visitante: su anterior equipo, Jets, en la semana 1; Patriots, Bengals, Chargers, Bears, Ravens, Lions y Browns.
El calendario también incluye un enfrentamiento contra Green Bay en el Sunday Night Football de la Semana 8, cuando Pittsburgh reciba a los Packers en su estadio, lo que representa un encuentro entre Rodgers y la franquicia donde desarrolló la mayor parte de su carrera profesional.
"¿Qué lugar mejor para terminar que en una de las franquicias pilares de la NFL? Con Mike Tomlin y un grupo de liderazgo, jugadores y una ciudad que espera que ganes", dijo visiblemente optimista Rodgers sobre su elección de los Steelers para su temporada de despedida.
Curiosamente, los expertos ven como el primer hito de la carrera de Aaron Rodgers su triunfo sobre los Steelers en el Super Bowl XLV. Este triunfo representó más que un campeonato: marcó la transición exitosa después de la era de Brett Favre y estableció a Rodgers como un mariscal de campo capaz de liderar bajo la presión máxima.
La victoria contra Pittsburgh Steelers, con 304 yardas por pase y tres touchdowns, demostró su capacidad para ejecutar en el escenario más visto del deporte mundial.