No importa si es muy tarde o temprano, si hace frío o calor, si dormiste bien o si te cargas una crudota, los chilaquiles siempre serán uno de los desayunos

En esta ocasión, nos lanzamos a Barranca del Muerto a probar los de El Chilaquil Relleno, un negocio que lleva este platillo mañanero un paso más allá y nos regala una versión aún más monchosa, pues —como su nombre lo dice— todos sus chilaquiles están rellenos de

Ya sea quesanto, frijolístico, chichanieblas o el sabor que elijas, todos te van a saber a pura gloria, porque absolutamente todo en este changarro está inspirado en la lucha , desde su menú, sucursales, presentaciones y salsas, hasta su decoración, con guiños al Toreo de Cuatro Caminos y la Arena México.

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Todas las opciones del menú están más que recomendadas, pero nosotros nos quedamos con la salsa “ruda”, que como su nombre lo indica es la más picosa y sabrosa. Pide tus chilaquiles “míxticos” —la mitad “quesanto” y la otra mitad de tu sabor favorito—, el relleno de queso nunca falla.

Si tienes mucha hambre, el tamaño Gladiador es el ideal, aunque también las Tortas Aguayas con su cebolla morada son imperdibles. Y si eres de buen comer, remata con una hurracarrana de sabor y prueba los chilaquiles dulces con sabores de temporada como Fresa Enmascarada, que están espectaculares.

Hay quienes los piden diario por aplicación para romper el ayuno, y si estás cuidando la dieta, también tienen sus versiones “Chilafit”, asadas al comal. Puedes visitar su coliseo principal en Barranca del Muerto 478, o sus arenas en Calzada Taxqueña 1500 y Xola 955, además de una dark kitchen en Santa Fe para que nadie se quede sin disfrutar de unos buenos chilaquiles sin miedo a la cruda.

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