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CIUDAD DE MÉXICO.- Sin ayuda alguna, habitantes de Iztapalapa pasaron la noche con el agua que inundó sus casas. Calles, negocios, escuelas y hospitales también fueron cubiertos por la lluvia y el agua que salió por las alcantarillas.
La lluvia torrencial, los truenos y el río de agua que corría por las calles de la colonia San Lorenzo Xicoténcatl era el aviso de que el agua cubriría las calles de la colonia.
Aunque los habitantes de la zona intentaron poner a salvo sus pertenencias, hubo personas que no lograron rescatar muebles, aparatos eléctricos, camas, ropa y documentos.
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Así, en una laguna de agua negra permanecieron durante la madrugada y parte de la mañana. Aunque llamaban al teléfono de emergencias para que acudieran a desazolvar las alcantarillas, nadie acudió en su ayuda.
Fueron ellos mismos quienes con escobas y palas trataron de retirar la basura acumulada en las coladeras. El esfuerzo de los afectados no fue suficiente.
Al amanecer, las calles y domicilios de la zona continuaban con el agua anegada.
Casi 15 horas después, el nivel del agua, de más de un metro de altura, comenzó a bajar.
Ahí, comercios como un café internet quedaron anegados de lodo y basura. Las máquinas y muebles del local quedaron inservibles.
Pupitres, salones, baños y edificios de la escuela Braulio Rodríguez quedaron cubiertos de lodo y el residuo de las aguas negras que cubrieron al plantel.
Por eso los habitantes de la colonia decidieron bloquear la Calzada Zaragoza para exigir que la alcaldía acudiera a auxiliar a la gente.
Y sí, los empleados de Iztapalapa se presentaron a las calles de la colonia pero para asegurar que los vecinos se enteraran de su presencia.
El decir de los habitantes de la colonia es el mismo que el de los vecinos de Ejército de Oriente II. Y es que cada año padecen las consecuencias de las llamadas “lluvias atípicas”.
En la colonia Juan Escutia, la lluvia dejó a habitantes con todas sus pertenencias dañadas por el agua. Ellos dicen que aunque ya habían padecido las inundaciones, esta fue la primera ocasión que el agua sube hasta rebasar el metro de altura.
Y aunque han exigido que se construya un vaso regulador, hoy solo piden que se les pague por lo perdido durante la lluvia torrencial de ayer por la noche.