Chalco.— Para la familia Juárez Ruiz, las inundaciones en Chalco han sido como un deja vú. Año con año padecen las mismas afectaciones, pero esta vez los daños se agravaron porque su negocio se paralizó y quedó severamente golpeado.
Marcos, su esposa y dos hijos viven en la colonia Tres Marías. Se dedican a la elaboración de bolsas para regalo. Trabajan sobre pedido y la tarde del pasado jueves no pudieron entregar cerca de cuatro mil bolsitas porque todas se mojaron cuando el agua entró a su vivienda, y alcanzó una altura aproximada de medio metro, al igual que en otras casas y negocios.
Poco a poco han perdido la esperanza de que las condiciones en este municipio mexiquense mejoren. Pese a las promesas de las autoridades y del proyecto de renovación del Colector Solidaridad, optaron por dejar de comprar muebles, pese a que los que tienen están dañados.
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Misma historia. “Cada año es lo mismo, aquí cada que llueve, el agua nos llega arriba de las rodillas. Las inundaciones han dejado inservibles nuestros muebles y también algunos electrodomésticos”, refiere Marcos.
Hace un año, su familia fue una de las beneficiadas por los apoyos entregados por el Gobierno del Estado de México, que repartió enseres y ocho mil pesos a los afectados. Pero en este 2025, ninguna autoridad se ha acercado a ellos, bajo el argumento de que las condiciones han mejorado.
Y es que la vez pasada el agua subió más de un metro y tardaron más de un mes en desfogar la inundación. Aunque incompleta la obra del colector, ayudó a que el impacto fuera menor.
Lamentablemente para esta familia, los daños no solo han sido económicos, también han comenzado a tener problemas por la falta de higiene porque no pueden acceder a servicios básicos.
“Ayer no usamos ni el baño porque se botaba el agua y olía muy feo a caño”, dice Marcos.
En este municipio autoridades mantienen labores de desagüe y desazolve, mismas que, prevén, concluyan en las próximas horas.
