, quien se encuentra hospitalizado en el Policlínico Gemelli desde hace quince días, experimenta un estado de debilidad que podría exponerlo a nuevas infecciones, según informaron fuentes del Vaticano.

De acuerdo con el boletín médico emitido por la Sala de Prensa de la las condiciones clínicas del Sumo Pontífice permanecen estables. El comunicado indica que el Papa ha alternado entre ventilación mecánica no invasiva y períodos prolongados de oxigenoterapia de alto flujo, manteniendo una respuesta adecuada al intercambio gaseoso.

El informe señala que el Santo Padre no presenta fiebre ni leucocitosis. Sus parámetros hemodinámicos se mantienen estables. El Papa continúa alimentándose y realiza fisioterapia respiratoria de manera regular, colaborando activamente con el tratamiento. El comunicado confirma que no ha presentado episodios de broncoespasmo y se encuentra alerta y orientado.

Lee también:

Durante la tarde, Francisco recibió la Eucaristía y dedicó tiempo a la oración. Sin embargo, su pronóstico continúa siendo reservado.

Debido a esta situación, todas las audiencias y encuentros programados con el Pontífice han sido suspendidos hasta nuevo aviso. Los médicos esperan una evolución completa de su cuadro clínico antes de permitir la reanudación de sus actividades.

La preocupación principal del equipo médico radica en la posibilidad de que el estado de debilidad del Papa pueda facilitar la aparición de otras infecciones durante su estancia hospitalaria.

Google News

TEMAS RELACIONADOS